La constante transformación del panorama empresarial ha sacado a la luz la necesidad de reevaluar urgentemente las prácticas de liderazgo y contratación. Frases como "el liderazgo no está preparado para la silla" se han convertido en habituales, reflejando una realidad en la que muchos líderes carecen de las habilidades necesarias para desenvolverse en el contexto actual. Esta situación se ve agravada por la escasez de talento y la rápida evolución tecnológica, retos a los que hay que hacer frente con estrategias innovadoras y una mentalidad adaptativa.

El contexto actual del liderazgo

Un reciente estudio de Gartner destaca las principales prioridades de los directores de recursos humanos (CHRO) para 2024. Entre los retos citados se encuentran la eficiencia operativa, las relaciones laborales inestables, la escasez de talento y las transformaciones tecnológicas. Según el estudio:

• El 83% de los responsables de RRHH afirma tener dificultades para encontrar talentos con las competencias necesarias.
• El 57% afirma que la escasez de cualificaciones está socavando el rendimiento de las empresas.

Estas cifras no son sorprendentes, pero ponen de relieve la urgencia de abordar estos problemas con nuevas estrategias. La resistencia al riesgo y la insistencia en procesos obsoletos, heredados de la era industrial, contribuyen a la ineficacia de las operaciones actuales.

Contratación en transformación

El informe 2024 Future of Recruiting, elaborado por Linkedin Research y Linkedin Talent Solutions, refuerza la necesidad de evolucionar en las prácticas de contratación. Los enfoques tradicionales ya no son suficientes para satisfacer las nuevas prioridades de los profesionales y las dinámicas demandas del mercado.

Los debates en foros influyentes como el Foro Económico Mundial y SXSW han puesto de relieve la necesidad de un enfoque de la contratación más flexible y basado en las competencias. Las empresas deben adoptar nuevas competencias y una mentalidad ágil para atraer y retener a los mejores talentos disponibles.

Vías para acelerar las aptitudes y el desarrollo del liderazgo

Ante este escenario, es imperativo que los líderes de RRHH y otras áreas adopten una postura más audaz y estén abiertos a probar nuevos enfoques. Algunas estrategias incluyen:

1. Acelerar la disponibilidad de cualificaciones:
   • Invertir en programas de formación y desarrollo continuos que estén en consonancia con las necesidades estratégicas de la empresa.
   • Crear estrategias que puedan aplicarse rápidamente, ya que las necesidades cambian en pocos meses y corremos dos grandes riesgos: no hacer nada o entregar algo que no se ajuste al momento de la empresa.
   • Esté abierto a contratar competencias específicas bajo demanda para cubrir carencias y retos concretos de la empresa.
2. Apoyo asertivo para el desarrollo del liderazgo:
   • Implantar programas de tutoría, tutoría en la sombra y coaching adaptados a las necesidades individuales de los líderes.
   • Utilizar herramientas de evaluación continua para detectar las carencias de competencias y ofrecer una retroalimentación constructiva y específica.

El papel de RRHH

El papel de RRHH va mucho más allá de ocuparse de los procesos administrativos y burocráticos de contratación y despido. Los RRHH estratégicos abarcan una estrategia para atraer, retener y desarrollar el talento de la forma adecuada, y esto tiene un impacto directo en los resultados financieros de la empresa, ya que hay menos costes con los procesos de selección y los despidos constantes.

Según un estudio de Catho, las empresas brasileñas gastaron una media de 2.500 reales por despido en 2023, lo que supone un total de 100.000 millones de reales en costes de despido. Todos estos costes pueden minimizarse con una contratación más precisa y centrándose en lo que realmente marca la diferencia.

Conclusión

La capacidad de adaptación e innovación será crucial para que las empresas superen los retos de 2024 y más allá. Tanto el liderazgo como la contratación deben evolucionar para adaptarse a las nuevas realidades del mercado. Con un enfoque proactivo y flexible, es posible no sólo hacer frente a los obstáculos, sino también convertir estas dificultades en oportunidades de crecimiento y desarrollo sostenible. El momento de actuar es ahora, y el camino hacia el éxito reside en la valentía para experimentar y la voluntad de abrazar lo nuevo.

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