El mundo del trabajo es un relato en constante evolución, moldeado por los cambios sociales, económicos y tecnológicos. Desde los tiempos de la Antigua Grecia, cuando el trabajo se asociaba a una ocupación "devaluada", hasta nuestros días, hemos asistido a una sucesión de transformaciones que nos afectan a todos de manera profunda y cada vez más frecuente.

El trabajo siempre ha evolucionado, pero hoy en día los cambios se producen a intervalos más cortos, lo que repercute más directamente en nuestras vidas. Los últimos 20, 15, 10 y 5 años no han sido iguales, sobre todo después de la pandemia de COVID-19, que ha puesto aún más de manifiesto la complejidad del asunto.

Según una conversación que mantuve con Daniela Diniz, Directora de Contenidos y Relaciones Institucionales de Great People y Great Place to Work, en la Antigua Grecia, el trabajo era visto de forma negativa, reservado a las clases menos privilegiadas y alejado de las divinidades. La Revolución Industrial cambió esta dinámica, en la que el trabajo pasó a ser visto como una fuente de riqueza y supervivencia. En la era moderna, sobre todo en los años 90, el trabajo se fue reconociendo poco a poco como algo más que una fuente de ingresos. Instituciones como Great Place to Work (GPTW) surgieron junto con un cambio importante en la percepción de este tema. La búsqueda de una conexión entre el propósito personal y el empresarial, la necesidad de realización, el cuidado de la salud mental, el clima organizativo, el reconocimiento del compromiso y otros puntos ganaron terreno y transformaron la percepción del trabajo.

La gestión de las personas también ha evolucionado paralelamente a la transformación de la percepción del trabajo. De una relación puramente mercantil, en la que el trabajo era sólo un contrato (centrada en la empresa), hemos pasado a una visión más humanizada de cada individuo (centrada en las personas). La transición de la gestión de los recursos humanos a la gestión del talento se ha vuelto aún más compleja en este escenario. Al fin y al cabo, antes existía una relación entre puestos e insignias y no entre personas. 

Para aumentar la dificultad, con el avance de la tecnología y la globalización, los profesionales necesitan dominar un alto nivel de conocimientos técnicos, así como habilidades fundamentales para cubrir los puestos actuales. Estos cambios han dificultado la contratación de talentos cualificados en un ecosistema extremadamente competitivo. Para hacer frente a este reto, las empresas han tenido que revisar las prácticas de RRHH establecidas en el siglo XIX, basadas en modelos de gestión jerárquicos que ya no se adaptan a las exigencias actuales de la nueva economía. 

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The Josh Bersin Company, 2023 

Conectar las tendencias de RRHH con la evolución del trabajo

La Economía Abierta del Talento ha surgido como respuesta a este nuevo panorama de la nueva economía y a las dificultades a las que se enfrentan las empresas para acceder rápidamente a conocimientos especializados y permitir que el negocio sea más eficiente desde el punto de vista financiero. Adopta la fluidez del trabajo, conectando el talento a través de plataformas, trascendiendo las fronteras geográficas y proporcionando un enfoque flexible, accesible y rápido. Esta tendencia de los RRHH impulsa y apoya la evolución y el futuro del trabajo, ofreciendo una alternativa dinámica al modelo de empleo tradicional.

Además de confiar en el talento interno, las empresas pueden acceder al talento externo bajo demanda durante un periodo determinado para resolver sus retos empresariales. 

Este enfoque ofrece una oportunidad única de probar, degustar y aprovechar los conocimientos especializados de forma flexible. En lugar de comprometer recursos en contrataciones a largo plazo, la empresa puede recurrir a profesionales especializados durante el tiempo necesario para resolver una necesidad o problema concreto. Las plataformas de talento bajo demanda han agilizado la contratación de un profesional senior, acelerando el proceso de contratación. Otro punto importante en esta relación es el coste. Al fin y al cabo, la empresa sólo pagará por una fracción de hora. Es la oportunidad de contar con el profesional ideal para su reto empresarial. 

Además, la rapidez es un factor crítico hoy en día. La contratación bajo demanda, o a destajo, permite responder con agilidad a las demandas del mercado, lo que supone una ventaja competitiva. Esta capacidad de adaptación rápida y de acceso al talento es esencial en una economía que exige innovación constante y un enfoque dinámico. Las empresas ganan en eficiencia financiera, conocimiento e innovación, mientras que los profesionales conocen nuevos mercados, amplían sus contactos y generan negocio. 

Estamos en una era en la que la agilidad y la innovación son fundamentales para el éxito empresarial. Al conectar la demanda de especialización momentánea con la agilidad necesaria para afrontar los retos actuales, este enfoque se convierte en un diferenciador valioso y extremadamente competitivo para cualquier empresa.

¿Cómo se está preparando su departamento de RRHH para todos estos cambios y novedades en el lugar de trabajo? 

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Luciana Carvalho 

CEO y cofundador de Chiefs.Group

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